San Valentín también se celebra en la oficina

Os veis a todas horas, pasáis larguísimas jornadas laborales juntos, compartís situaciones de estrés además de algunos ratos de ocio, e incluso algún viaje… y de repente un día, o una noche, salta la chispa y aquello pasa de una mera relación de amistad entre colegas a otra cosa, el tiempo dirá si un ligue pasajero o una relación estable.

Es casi inevitable que surjan relaciones afectivas entre colegas de trabajo ¿Sabías que el 13 % de las parejas españolas se forman en la oficina? Son datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), que recogen además que el 51 % de los hombres y el 46 % de las mujeres han tenido una relación sentimental con alguien de su trabajo en alguna ocasión. “Es normal que haya ligues o relaciones, se pasan muchas horas juntos cada día, además de viajes en algunos casos, y las afinidades laborales hacen más probable que surjan puntos de unión”.

Así que son muchas las parejas que hoy celebran San Valentín en la oficina, aunque no todas lo hagan públicamente.

Si tienes un ligue en la oficina, hay una serie de cosas que debes tener claras para evitar que la situación te afecte negativamente:

– Código ético de la empresa. Las relaciones íntimas entre trabajadores no son bien recibidas en muchas empresas, por eso es importante saber si hay algún código ético o de comportamiento que indique algo al respecto. “Hay algunas empresas que lo tienen prohibido y despiden a uno o a los dos implicados. O bien, si no existe de forma explícita ese código, conviene saber si los jefes lo han declarado verbalmente o cómo han actuado antes en ocasiones similares”

– Morbo e infidelidades. Muchas de las relaciones que se establecen en el trabajo tienen el morbo añadido de lo prohibido: si, por ejemplo, ella es la jefa o él tiene novia. “En mucha ocasiones se asocian los ligues de trabajo a infidelidades, cuando uno o los dos tienen pareja, y es lo que suele aparecer en las películas, series y noticias de los medios de comunicación, de ahí gran parte del morbo asociado”.

– Mayor tasa de éxito. La escritora Shere Hite, famosa por su Informe Hite sobre sexualidad, afirma en su libro Sexo y Negocios que las relaciones de pareja en el trabajo son sanísimas y tienen una tasa de éxito muy superior a las mantenidas en otros ámbitos. Además, señala que suelen ser muy rentables para las empresas, ya que hay personas que, con tal de tener cerca a su amado-a, son capaces de quedarse horas y horas trabajando. Y pone el ejemplo de lo solícitos que se vuelven los compañeros cuando llega una chica nueva a la oficina.

– Evita ligar con jefes y subordinados. No es recomendable iniciar una aventura con una persona de la organización en la que hay una relación jerárquica vertical (jefe-subordinado) “porque se pueden confundir los roles y las expectativas, a veces no se tiene claro dónde termina la relación con el jefe-a y dónde empieza la de amante; y se generan suspicacias, rumores y cotilleos entre los compañeros, algo especialmente duro cuando la relación se termina de forma unilateral”. Es mucho más fácil establecer relaciones entre compañeros, y es preferible que pertenezcan a otro departamento o área de la empresa.

– ¿Contarlo o no contarlo? Antes de contarlo a otros compañeros es importante consensuarlo con la otra persona, para evitar problemas. “Siempre genera tranquilidad tener aliados, explícaselo así a tu ligue”, se recomienda no negarlo: “La credibilidad y confianza profesional se puede ver deteriorada. Si vemos a un compañero o subordinado negar algo evidente, podemos perder la confianza en él: si me miente en esto, ¿me estará diciendo la verdad en otras cosas?”

– ¿Y si la relación se rompe? Afrontar una ruptura puede ser difícil para muchos ex amantes, ya que vas a seguir cruzándote con la otra persona permanentemente en la oficina, quieras o no. “Debemos analizar qué nos está afectando: el rechazo de la otra persona, la opinión de los demás compañeros (si lo saben), el miedo a las consecuencias profesionales que pueda tener, etc. Mi recomendación es que se planteen las cosas de forma abierta y sincera con el ex”.  “No hay arrepentimiento una vez que el romance muere por causas naturales”, dice Hite en su libro, pero tampoco amnesia: “En el tránsito de los amantes hacia el terreno movedizo de una amistad con pasado sexual normalmente la relación cambia de rumbo y prevalece la camaradería”.